En Estados Unidos, los indicadores de empleo se mantienen sólidos, al tiempo que aumentos salariales generaron ciertas perturbaciones en los mercados financieros. Conforme a indicadores adelantados, el Producto Interno Bruto (PIB) aumentó a una tasa anualizada de 2,6% en el cuarto trimestre del 2017, por debajo de lo registrado en el tercer trimestre (3,2%) y de las expectativas de mercado (3,1%).
Según una minuta del Banco Central del Paraguay (BCP), la desaceleración en el PIB real estadounidense está explicada, principalmente, por una reducción de la inversión en inventarios privados y un aumento de las importaciones; reducciones que fueron compensadas por contribuciones positivas en el gasto en consumo personal, inversión fija residencial y no residencial, mayores exportaciones y una expansión de gastos del gobierno federal, estatal y local.
En el sector manufacturero, el PMI de enero se ubicó en 59,1, levemente por debajo del dato de diciembre (59,3), explicado principalmente por la reducción del empleo, de los nuevos pedidos y de la producción. Por otro lado, la percepción de los consumidores sobre las condiciones del mercado aumentó en enero después de la caída presentada en diciembre. Al respecto, el indicador de confianza del consumidor se situó en 125,4, por encima de lo registrado en el mes anterior (123,1). En el mercado laboral, la tasa de desempleo se mantuvo en 4,1% en enero, mientras que la tasa de participación fue 62,7%, ambas tasas se mantienen por cuarto mes consecutivo. Al mismo tiempo, las nóminas no agrícolas se incrementaron en 200 mil puestos en el mismo periodo, principalmente en las actividades de construcción y en los servicios alimenticios, atención de la salud y actividad manufacturera.
En cuanto a los precios, la inflación medida por la variación del PCE (Personal Consumption Expenditure Price Index) se situó en 1,7% en diciembre (1,8% en noviembre), al tiempo que la inflación núcleo del mismo índice fue 1,5% interanual similar a lo registrado el mes previo (1,5%). Por su parte, el índice de precios al consumidor (IPC) registró un aumento interanual de 2,1% en enero, similar al mes anterior, explicado, básicamente, por los incrementos en los precios de la energía. La inflación núcleo del mismo índice se ubicó en 1,8% interanual, similar al mes de diciembre.
En cuanto a la política monetaria, en su reunión de enero, la Reserva Federal decidió, mantener la tasa de interés de los fondos federales en el rango de 1,25% – 1,50% anual, basándose en la evolución observada y esperada del mercado laboral y de la inflación. En tal sentido, la Reserva Federal indicó que la política monetaria se mantiene acomodaticia, apoyando así el fortalecimiento de las condiciones en el mercado laboral y el retorno sostenido de la inflación relevante al 2%. Posterior a la reunión, datos de incrementos salariales llevaron a mayores expectativas de inflación y de posibles alzas de tasas de interés, generando cierta volatilidad en los mercados financieros internacionales, que luego se atenuaron marginalmente.