El informe de JP Morgan que colocaba a España como la «mejor economía de Europa», mostraba su asombro por todo lo anterior y concluía que realizando «un análisis detallado de los datos del mercado laboral también ha influido una mayor tasa de participación de los trabajadores migrantes en la fuerza laboral en relación con los trabajadores nativos (este no es el caso de Francia y Alemania), lo que probablemente refleje una integración más fácil de los inmigrantes latinoamericanos a la fuerza laboral española. También hay evidencia de quela reciente ola tiene un nivel promedio de educación más alto que antes de la pandemia». Un estudio del Banco de España sugiere que la inmigración contribuyó con más del 20% al crecimiento cercano al 3% del ingreso per cápita del PIB durante 2022-2024, por ejemplo.