En la región, Brasil continúa consolidando gradualmente su recuperación económica. En el cuarto trimestre, la variaciónvinteranual del PIB fue 2,1% (1,4% en el trimestre previo) explicada principalmente por la expansión del consumo y de la inversión. Para el Banco Central del Paraguay (BCP), con este resultado, el crecimiento del 2017 del gigante sudamericano se ubicó en 1%, por encima de lo previsto inicialmente. Asimismo, los indicadores adelantados han seguido afianzándose en los primeros meses de este año, entre estos el PMI, que se ha mantenido en la zona de expansión y ha presentado un repunte en relación al informe anterior. Por otro lado, la inflación permanece baja, contexto en el cual el Copom decidió nuevamente reducir la tasa de referencia a 6,5% en marzo y con expectativas de una disminución adicional en la siguiente reunión. En este escenario, las proyecciones de crecimiento para el 2018 y 2019 se han revisado al alza con relación al IPoM de diciembre. Actualmente, el riesgo más relevante para las
perspectivas se deriva del ámbito político.
Argentina mejora
En Argentina, también continúa observándose una mejora en las condiciones económicas, si bien la inflación permanece elevada. En el cuarto trimestre, el PIB verificó una expansión de 3,9%, impulsada fundamentalmente por la demanda interna (consumo e inversión). Estos buenos resultados han seguido durante el 2018, lo que se ha reflejado en la trayectoria de los indicadores de corto plazo, tanto del sector industrial como de la economía en su conjunto. A pesar de esto, las cifras de crecimiento se corrigieron a la baja, fundamentalmente debido a la sequía que afecta al sector agrícola. Respecto a los precios, la inflación interanual ha vuelto a aumentar desde el último informe, principalmente por la depreciación del peso respecto al dólar y por el ajuste de algunos precios regulados.