En el marco de los 30 años de la “Convención sobre los Derechos del Niño”, que se cumplió ayer 20 de noviembre, el Palacio de López se ilumina de azul y se suma simbólicamente a la celebración. La conmemoración de esta fecha es organizada por el Fondo de Población de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), fue aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1989 y ratificada por Paraguay en 1990 y es la Ley 57/90.

Paraguay participa de las celebraciones globales por el aniversario de la Convención, uniéndose a los edificios más emblemáticos del mundo que también se iluminan de azul, para demostrar su apoyo a la vigencia de los derechos de la niñez y la adolescencia.

Compromiso histórico

Hace 30 años los dirigentes mundiales suscribieron un compromiso histórico con todos los niños del mundo, al aprobar la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, que se convirtió en el acuerdo de derechos humanos más ampliamente ratificado de la historia y contribuyó a transformar la vida de niñas y niños de todo el mundo. En Paraguay fue ratificada  en el año 1990 y es la Ley 57/90. Es el primer tratado vinculante a nivel nacional e internacional, que reúne en un único texto derechos civiles, políticos, sociales, económicos y culturales para las personas menores de 18 años.

Consagración de derechos

Está compuesta por 54 artículos que consagran derechos vinculados con la supervivencia, el desarrollo, la protección y la participación de niñas, niños y adolescentes, que deben ser propiciados por parte de la familia y la sociedad y garantizados por los Estados. Los Estados que se adhieren a la Convención para cumplirla. En virtud de ello, asumieron la labor de adecuar su marco normativo y de destinar todos los esfuerzos que sean necesarios para lograr que cada niño goce plenamente de sus derechos.

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