El proyecto de Modernización y Mecanización de la Agricultura Familiar logró empoderar económicamente a más de diez mil mujeres. De las 26.000 personas beneficiarias, 43% son mujeres, muchas de ellas, jefas de hogar.
Con ello se logró también brindar una vida más digna a sus familias. Transformando las oportunidades que existen en el sector rural en realidades que generan condiciones para mantenerlos fuera del rango de pobreza.
El proyecto inició en el 2014, con el objetivo de aumentar los ingresos de estas familias gracias a la incorporación de tecnología en sus parcelas, es decir, una preparación del suelo más eficiente con semillas certificadas, aplicación efectiva de especificaciones técnicas y el despliegue de buenas prácticas agrícolas.
Se busca que las familias avancen cada vez más en superficies agrícolas con sistemas de siembra directa, además de comercializar el producto de la cosecha y fomentar en estas comunidades agrícolas las prácticas de cooperativismo, solidaridad y otros valores comunitarios que permitan garantizar la sustentabilidad de las familias.
Todo esto se realiza con apoyo técnico de la Secretaría Técnica de Planificación del Desarrollo Económico y Social (STP), el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), la Itaipú Binacional y la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS).
Con el trabajo conjunto y articulado se ha logrado la inclusión social de 6.500 familias que se encuentran en pobreza extrema, gracias a la innovación que propone el proyecto con un capital de semillas para pequeñas unidades familiares y la asistencia técnica con capacitaciones en territorio.
Estas acciones se realizan en el marco de la Estrategia del Gobierno Nacional para la reducción de la pobreza y pobreza extrema, Sembrando Oportunidades, dentro del proyecto denominado Familia por Familia.