El ministro secretario ejecutivo de la Secretaría Técnica de Planificación del Desarrollo Económico y Social señaló que “los procesos de desarrollo, son procesos de cambio” al realizar un balance de los cuatro años de gestión del Gobierno Nacional del presidente Horacio Cartes Jara. Fue en el programa 365 de la TV Pública que realizó un balance de la gestión gubernamental a cuatro años de su ascensión.
Explicó que en Paraguay existe una fórmula para ser exitosos en los procesos de cambio que posee dos ingredientes: “El primero es una visión de mediano y largo plazo y el otro es un proceso participativo que sustente esa visión. En las ocasiones que hicimos eso como sociedad paraguaya hemos tenido éxito”, acotó el ministro.
Añadió que un ejemplo de ello es el período de la Independencia, donde existió la visión de ser libres y soberanos, sustentados por un proceso participativo, entre 1811 – 1813. “Hoy 206 años después observamos y nos damos cuenta que hemos sido exitosos”. Agregó que otro ejemplo entre 1989 y 1992, “cuando nos dimos cuenta que ser libres y soberanos estaba bien, pero también queríamos ser democráticos. Para ello generamos una visión de mediano plazo, sustentada en un proceso participativo y, gracias a ello, estamos disfrutando de casi tres décadas de democracia como nunca antes lo hicimos”.
Amplió que en el artículo 177 de la Constitución de 1992 se estableció que los Planes Nacionales de Desarrollo son de cumplimiento obligatorio para el sector público e indicativo para el sector privado. “Y por alguna razón hemos desobedecido ese artículo, y no hemos tenido un plan nacional de desarrollo sino hasta el 2014”.
Receta exitosa
Molinas recordó que cuando se elaboró el Plan Nacional de Desarrollo, entre todos los paraguayos, se tomaron los dos ingredientes de la receta de éxito: “Una visión a largo plazo al 2030, sustentado por un proceso muy participativo, 13 meses de consulta donde hablamos con todos los partidos políticos, los sectores sociales, los departamentos, y básicamente generamos una agenda de transformación al 2030, que quiere ser una agenda de transformación de mayor eficiencia, de mayor inclusividad y de mayor transparencia. Y eso, como los generamos entre todos, lo estamos implementando también entre todos”, manifestó tajantemente.
Explicó que este proceso de planificación, que es el Plan Nacional de Desarrollo (PND) Paraguay 2030, fue conectado al Presupuesto General de Gastos, a sistemas de monitoreo, a los municipios que tienen sus Planes Municipales de Desarrollo, Y se creó una institucionalidad participativa como el Equipo Nacional de Estrategia País (ENEP) con el sector privado, sociedad civil, sector académico, entre otros. Y también a nivel local con los Consejos de Desarrollo Municipal.
Significó en que básicamente no es la Secretaría Técnica de Planificación la que planifica, sino que es el País con todas sus fuerzas vivas, generando una visión que incorpora a todos y genera la institucionalidad que permite trabajar entre todos y empujar esta agenda de transformación del país. Insistió que la clave para el desarrollo del país es la visión compartida.
“Y esa visión compartida plantea transformaciones profundas. Transformaciones para ser más eficientes, donde la ganadería, la agricultura, las industrias culturales, la formación de capital humano avanzado es necesario. Ser más inclusivos, los programas de salud, de vivienda, de generación de ingresos; ser más transparentes y tener una inserción estratégica al mundo, acercarnos a la OECD que es otro elemento central dentro de esta administración”, acotó el ministro. Asimismo, generar planes de gobierno abierto que nos posiciona entre los países de mayor transparencia a nivel del planeta.
Agregó que “esas transformaciones las hacemos entre todos y requieren de innovaciones en la gestión pública también. Hay que ajustar la montura mientras el caballo está galopando, porque no se puede parar, sino hay que mejorar”.
Ejemplificó lo que está ocurriendo dentro del país más inclusivo. Se ha expandido la atención primaria en salud, se han expandido los programas de transferencias monetaria condicionada, Tekoporã, el aporte de pensiones no contributiva para adultos mayores, pero además de eso, “empezamos a probar modelos de intervención para los más vulnerables, empezamos a organizarnos a nivel territorial con los consejos de Desarrollo Municipal, y el sector privado se empezó a organizar en cómo promover cadenas de valor inclusivas”.
Recalcó que luego se deben ir juntando estas piezas. A medida que se va avanzando se mejoran también los mecanismos de gestión pública. Y eso es un elemento muy importante que es transversal. Hay muchas innovaciones de cómo se gestiona públicamente.
Por ejemplo, añadió, la institucionalidad, la gobernanza del programa de Becas Carlos Antonio López es un aprendizaje, donde hay un comité estratégico interministerial, con participación del sector privado, y una unidad ejecutora donde básicamente se implementan esas acciones estratégicas. Ese mismo elemento que funciona, funciona también con el Fondo de Excelencia. Y funciona con el programa de Modernización de la Agricultura que ha venido incorporando tecnología en la agricultura familiar y ahora queremos llevarlo también a los programas de pobreza y de desarrollo.
Finalizó su alocución indicando que hay innovaciones en la forma en que se va gestionando, en una forma participativa, consistente con esa visión que generamos entre todos, que es una innovación central en la gestión pública nacional.