En ese sentido, se puede señalar que la inversión del Gasto Social en los últimos diez años experimentó un promedio de crecimiento del 9%, lo que en términos monetarios equivale a G. 1,1 billones.
La estructura del gasto social se compuso principalmente en un 32% por recursos para el sector de Educación, en tanto que, para Salud con el 26%, mientras que, Promoción y Acción Social, así como, Seguridad Social, participan en un 20% y 18%, respectivamente. El resto de los sectores componen el 3% del total destinado a gasto social.
Entre los principales desembolsos en el sector de Educación se destacan los desembolsos para el servicio educativo de primer y segundo ciclo de la EEB, como así, para el tercer ciclo de la EEB y EM, que incluye principalmente sueldos a docentes y transferencias en concepto de gratuidad escolar.
En Salud, los recursos fueron destinados principalmente a los servicios hospitalarios para la reducción de la morbimortalidad, que integran los 18 hospitales regionales a nivel país, los maternos infantiles y hospitales generales.
En cuanto a Promoción y Acción Social, en este sector se destacan las inversiones realizadas para el pago de pensión alimentaria para adultos mayores, también, las transferencias monetarias con corresponsabilidad a familias que se encuentran en situación de pobreza a través de Tekoporã, Tenonderã, entre otros.
La prioridad fiscal de los Servicios Sociales dentro de la Administración Central, al término del mes de agosto del 2023 fue del 57%, es decir, de G. 100 ejecutados por la Administración Central, G. G. 57 fue para gasto social. El promedio de la prioridad fiscal de los últimos diez años fue del 55%.
|